La distribución Knoppix casi no necesita introducción. Fue la primera distribución popular que proveyó un LiveCD; en otras palabras, un CD-ROM de arranque que ejecutaba un sistema Linux listo sin necesitar un disco duro — se mantendría intacto cualquier sistema ya instalado en la máquina. La detección automática de los dispositivos disponibles le permitió a esta distribución funcionar en la mayoría de las configuraciones de hardware. El CD-ROM incluye casi 2 Gb de software (comprimido) y la versión en DVD-ROM todavía contiene más.
La combinación de este CD-ROM y una llave USB le permite llevar sus archivos a todos lados y trabajar en cualquier equipo sin dejar rastros — recuerde que la distribución no utiliza el disco duro en absoluto. Knoppix utiliza LXDE (un escritorio gráfico liviano) por defecto, pero la versión en DVD incluye tambien GNOME y KDE. Muchas otras distribuciones proveen otras combinaciones de escritorios y software. Esto es posible, en parte, gracias al paquete Debian
live-build que hace relativamente sencillo crear un LiveCD.
Sepa que Knoppix también provee un instalador: puede primero probar la distribución como LiveCD y luego instalarla en un disco duro para obtener mejor rendimiento.